El aniversario coincide con la festividad del santo patrono San Vicente de Paul y, por eso, en la jornada de ayer se instauró un feriado
Por decreto, la Provincia instauró el nombre de San Vicente a esta comuna, data que coincide con el día en el que se celebra al santo patrono San Vicente de Paul. A partir de la creación de su Carta Orgánica, en 2013, la fecha de fundación se cambió al 27 de septiembre de 1961, fecha en que Misiones instauró por decreto el nombre de San Vicente.Además, ésta coincide con el día en el que se celebra al santo patrono San Vicente de Paul. Para no dejar lugar a dudas, la propia Carta Orgánica Municipal determina fechas clave para la conmemoración comunitaria.“Denominación Oficial del Municipio, San Vicente; fecha fundacional y Día del Santo Patrono 27 de septiembre de 1961, fecha en que se dicta el decreto provincial Nº 3.333 a través del cual se oficializa dicho nombre a la localidad, por entonces identificada como kilómetro 260 de la ruta nacional 14”, artículo primero, título primero de la norma fundamental sanvicentina.Más adelante, en el artículo 18 -significado de la bandera municipal-, al describir simbolismos, fija que “el color azul-celeste de la banda de la derecha simboliza dos representaciones; por una parte el vínculo con nuestra enseña nacional y por otra toda la riqueza del agua en el municipio, a través de los innumerables cursos de agua que inician su recorrido en esta zona, sus nacientes, sus saltos, su belleza y la presencia del agua en uno de los municipios más lluviosos de la provincia y del país (2.000 milímetros aproximadamente)”.El color rojo de la banda de la izquierda vincula con tres ideas: en primer lugar, con el rojo de la enseña provincial del prócer don Andrés Guacurarí; en segundo lugar, con el rojo del sistema federal que rige en la república; y por último, alude también al rojo del suelo, de la madre y rica tierra colorada la que sustenta su agricultura, su producción, parte de su riqueza y donde se asienta, vive y trabaja gran parte de su población. Tierra roja que tiñe todo el entorno, como una marca, un sello indeleble que deja sus improntas en todo lo que lo rodea.Consecuentemente, hoy es fecha de conmemoración fundacional y del santo patrono de San Vicente. Una serie de eventos cívicos, culturales, religiosos viene desarrollándose con amplia participación ciudadana.Un templo que es símbolo
Un ícono de la arquitectura sanvicentina es el hermoso y elegante templo parroquial. Prácticamente todo el pueblo tuvo que ver con su construcción, llevó 18 años terminarla, trabajando chicos y grandes; hasta algunos albañiles y pintores trabajaban de noche, cuando les quedaba un tiempo para no parar la obra.Hace casi diez años atrás, Jorge Maniak, párroco local contó a El Territorio: “Es difícil la historia en Misiones. La gente entró a la selva y con ellos entré yo, un joven sacerdote. Fue en 1968 y ahí empecé otra vida, una lucha dura, difícil, también al lado de mucha gente joven, gente de trabajo, en su gran mayoría agricultores. Porque hay que empezar con la historia de ellos para comprender después la historia de esta iglesia”.La pequeña capilla fue el lugar de sus prácticas religiosas, de sus llantos, angustias y de sus logros y triunfos. Trabajó con la primera iglesia y luego con esta más nueva, más grande y moderna, que es hoy símbolo de San Vicente.Son símbolos de ayutorio, de colaboración y generosidad ahí en el medio del monte, rodeados de selva, que Dios guardó para esta generación. Empezó de la nada, y desde aquí se luchó por cada escuela, por el primer hospital, por cada picada, cada camino, capillas e iglesias. Así crecieron las comunidades rurales, con condiciones magníficas de clima, de tierra fértil, de brotación. Gente de un lado sufrida y luchadora, y por otro lado agradecidos de encontrar espacio y tierra buena para sembrar y crecer.A eso se debió el progreso, a ese entusiasmo de pueblo. Hoy se puede disfrutar de una ciudad que la hicieron todos juntos. Antes era El Cruce y hoy San Vicente y se emplearon las vidas en el crecimiento de la localidad, y todo a pulmón porque no llegaron grandes empresas, ni industrias enormes, sólo la agricultura y la lucha de la gente, hoy la ciudad es pujante y hermosa.San Vicente es una ciudad muy religiosa, de mucha fe, necesitaba bautizar sus hijos, el sacramento, los cultos, las celebraciones y misas y es por eso que llegó a tener 50 capillas distribuidas en todo el municipio.Hoy posee dos parroquias, San Juan Neumann en Fracrán y San Vicente de Paul. Más allá de lo religioso, San Vicente ha sido desde siempre un trampolín, una antesala codiciada para abordar los atractivos del Alto Uruguay. La hotelería y gastronomía ofrecidas allí son aprovechados y preferidos por muchos enamorados de la ruta costera 2. El turismo moderno ha encontrado en las manifestaciones artísticas y en la producción cultural aliados competentes que jerarquizan las ofertas. Tradicional asado y varias actividades Se celebró en San Vicente la fiesta cívica por el aniversario N° 61 de la ciudad. El acto protocolar se llevó a cabo en la Casa de la Historia y la Cultura del Bicentenario, del cual participó el intendente municipal, Sergio Fabián Rodríguez acompañado por autoridades municipales y del Honorable Concejo Deliberante, además de representantes de las fuerzas vivas, de la educación primaria, secundaria y universitaria, de la comunidad religiosa, empleados municipales, pioneros y vecinos.El intendente Rodríguez agradeció el esfuerzo y el sacrificio que los pioneros realizaron por la ciudad.A su vez, pidió el compromiso de los todos los que tienen responsabilidades públicas: “Tenemos un pueblo que tiene mucho por dar todavía, a los que circunstancialmente estamos en funciones, que demos todo por este querido San Vicente”.Y afirmó que “esta ciudad y su transformación depende de cada uno de nosotros, apostemos al futuro”.Cada año, desde hace más de cinco décadas los sanvicentinos tienen por costumbre hacer una celebración por su santo patrono en comunidad con un asado comunitario y acompañado por diversas actividades artísticas y danzantes.Ayer, martes, se realizó la concentración en el ícono del Santo Patrono para la procesión por las calles del pueblo y luego se dio paso a la misa de acción de gracias con la presencia del obispo Damián Santiago.Después de la misa se desarrolló el sorteo del bono colaboración con shows en vivo de Cristian y La Ruta, Pablo y su grupo y Fusión Sonora. En tanto que por la tarde se disfrutó de dos actividades interesantes para poner en movimiento al cuerpo: el vóley mixto y la maratón inclusiva solidaria.El vóley mixto tuvo premios para los ganadores y la inscripción fue un alimento no perecedero. Participaron adolescentes y jóvenes de barrios, capillas o colegios.Por otro lado la maratón inclusiva solidaria San Vicente de Paul tuvo su concentración frente a la parroquia San Vicente de Paul.