Para América Latina, la situación de la biodiversidad es cada vez más crítica como consecuencia de distintos factores, que son algunos de los causantes de la pérdida de flora y fauna autóctona, como son: incendios, tráfico y venta ilegal, presencia de especies exóticas invasoras, contaminación y el cambio climático. Es por eso que, en el Día Mundial de la Vida Silvestre, las Naciones Unidas señalan a esta fecha como una oportunidad para que la sociedad comprenda “el incalculable valor de la vida silvestre”, ya que la flora y fauna contribuyen directa o indirectamente con el bienestar humano, sobre todo aporta a la salud.
Este 2023, desde el organismo internacional buscaron conmemorar esta jornada bajo la premisa de “Alianzas en favor de la conservación de la vida silvestre”. El objetivo, destacar y dar a conocer que el trabajo que realizan en red las organizaciones, el cual es la clave para tratar de contrarrestar la pérdida de biodiversidad que estamos presenciando.
Uno de estos organismos es la Fundación Temaikèn, la cual dio detalles de algunos de los proyectos que se llevan adelante. “Las alianzas locales con gobiernos, organizaciones de la sociedad civil, universidades, escuelas, instituciones científicas, el sector privado son esenciales para articular estrategias de conservación”, afirmó Paula Gonzalez Ciccia, directora de Conservación, Educación e Investigación de dicha fundación.
Con este fin, la organización también forma parte del movimiento global “Revertir el rojo”, mediante su Centro de Supervivencia de Especies. Este centro fue creado en alianza con la Unión Internacional por la Conservación de la Naturaleza (UICN), el cual es considerado como el mayor referente del mundo al respecto del estado de conservación global de especies de animales, hongos y plantas.
Cuáles son las especies en estado crítico o en peligro de la Argentina
“Durante estos 20 años, gracias a nuestro aporte y el de las alianzas realizadas, pudimos recuperar 15.000 animales provenientes de distintas situaciones: incautaciones, tenencia ilegal, atropellamientos o envenenamientos”, detallaron desde la Fundación. Es que las redes de trabajo para la conservación de especies en la Argentina enfrentan una labor ardua, que a veces es poco conocida. Sin embargo, desde estos espacios advierten que, a pesar de que generalmente es un trabajo sin mucho descanso, también brinda satisfacción.
Según detallaron, algunos de los trabajos que realizan se enfocan en animales como el aguará guazú, ciervo de los pantanos, cardenales amarillos, cóndores andinos, entre otros.
Es por eso que, como parte de la conmemoración por el Día de la Vida Silvestre, Fundación Temaikèn presentó su nuevo proyecto con los caracoles de Apipé (Aylacostoma chloroticum), moluscos que se encuentran críticamente amenazados e incluso están catalogados en la Lista Roja de la Unión Mundial para la Naturaleza (UICN), como “extinto en vida silvestre”.